LAS LEGIONES MALDITAS, de Santiago Posteguillo

Si "Africanus" la primera parte de la trilogía de Escipión de Posteguillo empezaba de forma algo titubeante y desapasionada para luego ir mejorando progresivamente, esta segunda entrada en la saga empieza ya con en tren a toda máquina. Es cierto que el autor había dejado la historia en un punto interesante y que la historia ya está en pleno desarrollo al empezar el libro, perno es sólo eso. Posteguillo y ano comete aquí ninguna torpeza de novato, tiene muy claro lo que quiere contar y cómo contarlo y, sobretodo, a mejorado mucho en la caracterización y desarrollo de los personajes. No sólo las batallas son aun más vívidas y espectaculares, también las maniobras de Quinto Fabio Máximo, rival de Escipión en el senado, se nos cuentan con mucho más pulso, convirtiendo al viejo senador en un antagonista tan memorable cómo el propio Aníbal.

Igualmente la trama del escritor de teatro, Plauto, cobra más interés, mostrándonos otra cara de la vida en la República de Roma con igual cuidado por el detalle. Sólo una cosa frena un poco el ritmo trepidante de "Las legiones malditas" y es la costumbre (no me atrevo a llamarla manía) del autor de recapitular constantemente, resumiendo una y otra vez los logros, victorias y derrotas de Escipión, Anibal y Máximo, entre otros. Parece que el autor piensa que el lector es cómo un alumno al que realmente no le interesa esta lección de historia y hay que repetirle constantemente los hechos básicos para que no se pierda. En cualquier caso, es un pequeño precio a pagar por conocer la epopeya de las legiones V y VI, desterradas a Sicilia por su humillante derrota en la batalla de Cannae y posterior huida, en su empeño por recuperar el honor perdido.

Veredicto: 8,5 Más y mejor que la primera entrega de la trilogía.