SALAMINA, de Javier Negrete

Cuando se estrenó "300" me quede pensando que era un poco injusto que los espartanos sean recordados cómo los héroes de las guerras médicas. Lo cierto es que, exceptuando el breve momento de gloria de Leónidas y su guardia personal, los espartanos se comportaron cómo una pandilla de cobardes durante toda la guerra contra los persas. Primero se escabullieron en Maratón de enfrentarse al rey Dario, y luego, diez años más tarde, volvieron a poner la excusa de las carneas para escurrir el bulto frente a su hijo el Gran Rey Jerjes. Sinceramente, que un pueblo dedicado por completo a la guerra, tuviera una tradición religiosa que les prohibiera ir a la guerra durante un mes siempre me pareció una excusa barata. Lo que no sabía es que algunos historiadores de lo más serios comparten mi opinión. Javier Negrete también la comparte y en esta novela deja a los espartanos en el lugar que creo que merecen (salvando, claro, a Leónidas y su intervención en la batalla de las Termópilas que, ...